Andalasia Cakes: TARTA DE WATERPOLO PARA MIS AHIJADOS

Hoy es el cumpleaños de mis sobrinos, Peri y Guille, dieciséis años ya... como pasa el tiempo, bueno el caso es que son unos excelentes jugadores de waterpolo, así que esta claro que si les quería personalizar una tarta, tenía que ser del deporte que practican, el problema es que durante toda la semana he tenido un montón de trabajo y no me había podido dedicar a prepararla, al final la he tenido que improvisar, deprisa y corriendo, entre el sábado por la noche y la mañana del domingo, por eso, y no os riáis, las porterías me han quedado un poquillo cutrillas, pero la experiencia en general me ha gustado, a pesar del puñetero calor que sigue haciendo y el efecto que tiene sobre el fondant.

Para hacer la tarta esta vez he utilizado la receta de Red Velvet Cake "del Rincón de Bea", esta web tiene unas recetas de tartas americanas estupendas, así que me he vuelto una adicta de sus recetas, he utilizado el Cream Cheese Icing, de Mascarpone, queso crema y nata, esta receta os la puse cuando publique los Red Velvet Cupcakes, la tenéis en el recetario, es deliciosa.

RED VELVET CAKE

Ingredientes:

· 125 gr. mantequilla

· 275 gr. azúcar

· 2 huevos

· 280 gr. harina repostería

· 15 gr. cacao en polvo

· 1 cucharadita de levadura química

· 1 cucharadita bicarbonato sódico

· 1/4 cucharadita sal

· 240 gr. buttermilk (Suero de leche)*

· Colorante rojo (Americolor, Wilton, Sugarflair, McCormick)

· 1 cucharadita vinagre blanco

· 1 cucharadita extracto de vainilla

* El buttermilk, es difícil encontrarlo así que la forma casera de hacerlo es poner 240ml de leche entera en un recipiente, le agregáis media cucharadita de zumo de limón o de vinagre blanco y dejáis que repose unos cinco o 10 minutos, mientras vais preparando las cosas y al poco tiempo veréis que tiene un aspecto como si la leche se hubiera cortado, entonces está listo, yo prefiero añadir vinagre, porque además de hacer que la leche se corte, potencia el color y en este caso nos interesa que quede bien rojo.

Elaboración:

Precalentar el horno a 180º.
Preparar tres moldes desmontables de 18 cm. engrasados y con papel de hornear en la base.
Tamizar y reservar en un bol la harina, cacao en polvo, polvo de hornear, bicarbonato, y la sal.
Mezclar el buttermilk, colorante rojo, extracto de vainilla, vinagre y reservar.
Batir la mantequilla con el azúcar, hasta que haya blanqueado y consigamos una mezcla esponjosa.
Añadir los huevo uno a uno. No añadir el siguiente hasta que el anterior se haya incorporado totalmente. Continuar batiendo 1 minuto después de cada huevo.
Añadir los ingredientes secos que teníamos reservados en tres veces, y los líquidos en dos veces. Comenzando y terminando con los secos, es decir, se comienza con un tercio de los ingredientes secos, luego la mitad de la mezcla de buttermilk, otro tercio de los ingredientes secos, la otra mitad del buttermilk y terminamos con lo que nos queda de los ingredientes secos.
Dividir la masa entre los tres moldes que habíamos preparado y alisar la parte superior de la masa con una espátula.
Hornear durante 25 – 30 minutos o hasta que al insertar un palillo este salga limpio.

Dejar enfriar los moldes sobre una rejilla durante unos 15 minutos. Pasado este tiempo sacaremos los bizcochos de los moldes y los dejaremos enfriar durante al menos 45 minutos.
Cuando estén totalmente fríos, los envolveremos individualmente en papel film y los dejaremos reposar en la nevera durante la noche. Al día siguiente estarán más asentados el sabor y la textura del bizcocho, listos para montar nuestra tarta.